¿Por qué ocurren los cuelgues en procesadores Intel Core i9 de 13ª y 14ª generación?

Varios usuarios están experimentando cuelgues en los procesadores Intel Core i9 de decimotercera y decimocuarta generación para escritorio, un problema que ha creado una polémica en los últimos días. ¿Cuáles son las causas de este problema y la posible solución?

Cuelgues en procesadores Intel i9-13900K e i9-14900K

La historia es la siguiente, todo empezó cuando varios videojuegos empezaron a colgarse de repente en una configuración basada en una NVIDIA RTX y un chip de Intel, la marca azul dijo que estaba estudiando el problema, mientras que la verde le echo las culpas al fabricante de microprocesadores. Y es que los cuelgues en procesadores Intel se han convertido en tema candente en los últimos días.

Los afectados por este problema son los usuarios de los i9-13900K e i9-14900K de Intel que han observado problemas graves como: de repente Windows empieza a moverse lento, las aplicaciones fallan, aparecen pantallazos azules de la nada y los juegos dejan de funcionar repentinamente. Y es que haya cuelgues en procesadores de Intel que cuestan una cifra cercana los 1000 €, pues no es nada divertido.

Una posible explicación y solución al problema

Los cuelgues en los procesadores de Intel podrían tener una explicación técnica de lo que está ocurriendo, para ello tenemos que irnos al desajuste que existe entre ciertos parámetros en el chipset de la placa base y los límites reales de los microprocesadores.

Esto se debe a que ciertas placas base permiten el overclocking extremo para quien quiera montar un sistema avanzado de refrigeración por agua, lo cual no es el estándar, pero en algunos casos es la configuración estándar. Si bien los mecanismos de seguridad de la CPU se basan en el voltaje, el de la placa base tiene que ver con la otra parte de la fórmula, el amperaje, colocándolo en muchos casos por encima de los 307 A que recomienda el manual.

Ahora bien, es importante respetar las especificaciones de los i9-13900K e i9-14900K, así como sus semejantes, para evitar los cuelgues. Para empezar, según la documentación oficial, el amperaje máximo soportado es de 307 A y no de 512 A cómo marcan ciertas placas base.

Y en cuanto a la potencia, obviamente 4096 W es una burrada insostenible incluso para los chips más avanzados. Ya que como se puede ver en la tabla de más abajo, los i9-13900K e i9-14900K tienen un límite recomendado de 253 W, mientras que las versiones KS se van a los 320 W, aunque sabemos que en el caso del i9-14900KS la cifra supera los 400 W. Por lo que esos son los límites con los que deberías tener configurada la placa base para evitar los cuelgues en procesadores Intel como los i9-13900K e i9-14900K y derivados.

Dejémonos de tonterías y vamos a contar la verdad

Si bien lo que os hemos puesto arriba es importante para evitar cuelgues, hemos de partir del hecho de que ningún videojuego fuerza a esas potencias de consumo a los chips Intel. Si no que esos modos existen para activarse en medio de los benchmarks intensivos y poder sacar números mucho más altos que los de la competencia y poder vender microprocesadores usando para ello gráficos de barras en las presentaciones.

Entonces, ¿si los chips en teoría no alcanzan ese consumo y calor generados en videojuegos? ¿De dónde vienen los cuelgues en los procesadores Intel? Pues aplicando la navaja de Occam, de una mala gestión del voltaje y de la energía de estas CPU, lo cual es cuanto menos para echarse las manos a la cabeza. Cada microprocesador debería ser capaz de ajustar sus velocidades y voltajes para alcanzar la mayor velocidad posible con la menor potencia energética permitida.

Y es que con respecto a la CPU es lo que se ha hecho, Intel tiene programada una curva de frecuencia y potencia en sus microprocesadores que tiene unos límites de corriente (307 A) y de potencia. ¿Qué ocurre cuando el chipset de la placa base modifica dichos límites? Entonces, la CPU para poder alcanzar esas cifras empieza a pedir voltajes mucho más altos, y todo por el hecho que no alcanza los nuevos límites de potencia y corriente. Lo que acaba activando el mecanismo de seguridad para evitar que la CPU se sobrecaliente en exceso.

Entonces, ¿por qué es culpa de Intel el cuelgue de sus procesadores?

No son marcas como ASUS, MSI, GIGABYTE, ASRock y muchas otras que ahora no recordamos las que diseñan y fabrican el chipset de la placa base, sino la propia Intel. El hecho de que sus CPU no tengan unos límites de potencia equivalentes a los de AMD es por un motivo. Bajo esas circunstancias no serían competitivas en rendimiento y perderían. La gente olvida que Intel empata en pruebas de rendimiento con AMD colocando a sus chips en potencias mucho más altas, lo cual es hacer trampas al solitario.

Ninguno de los fabricantes va a implementar en la placa base una función que no deje hacer el chipset, tan sencillo como esto. Por lo que esa capacidad de variar la curva está pensada para ejercicios de overclocking extremo, lo cual no es la norma y solo sirven para ejercicios de propaganda. En todo caso, no debería ser normal que el chipset provocase los cuelgues en procesadores Intel i9-13900K e i9-14900K modificando ciertos límites.