Pese haber conseguido comprar a Activision-Blizzard, la realidad es que las ventas de Xbox en Europa no son para tirar cohetes precisamente. ¿Podemos decir que la consola de Microsoft se encuentra en una crisis?
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Las ventas de consolas Xbox en Europa bajan a la mitad
Uno de los puntos más decepcionantes, independientemente del mercado del que hablemos, es cuando una marca alcanza el liderazgo solo por la popularidad de su nombre. Y no es por desmerecer al esfuerzo de Sony con PS5, pero si tenemos en cuenta los esfuerzos de Microsoft con el Game Pass, el lanzamiento de Starfield y lo que ha resultado un año flojo en exclusivos para PlayStation 5, pues sorprenden las ventas de Xbox en Europa.
Y es que mientras que Nintendo Switch empieza a sentir el efecto del tiempo con un 20% menos de consolas vendidas en el mismo periodo, en el caso de las ventas de Xbox en Europa la bajada es del 52%, mientras que Sony sin esfuerzo ha conseguido subir un 145%, según informa GI.Biz tomando información de GSD Data, que recopila información de varios editores en diferentes países de Europa que son Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Italia, Portugal, España. Rusia, Suecia y Suiza. Aunque hemos de partir de que no se han tenido en cuenta las ventas de Alemania y Reino Unido.
Teniendo en cuenta que jugar en Xbox es casi gratis por la existencia del Game Pass y su extenso catálogo de juegos, pues la situación no es muy halagador. Además, que Microsoft sumó Bethesda y otros equipos a su porfolio de desarrolladores trabajando en exclusiva en años anteriores, pero los efectos no se han visto reflejados en el catálogo de juegos.
Las campañas negativas están funcionando
Es más, se ha demostrado que las campañas negativas, en especial la realizada en contra de Starfield por parte de ciertos medios tendenciosos a favor de Sony, ha tenido más efecto que una campaña positiva para los productos de PlayStation, al mismo tiempo el departamento de marketing de Microsoft no ha estado a la altura para contrarrestar toda la negatividad sobre su consola. Lo que ha afectado a las ventas de Xbox en Europa de forma negativa o al menos en buena parte del viejo continente.
El problema de todo esto es que ambas consolas, PS5 y Xbox Series, son lo suficientemente buenas y casi idénticas en catálogo y planteamiento como para que una domine a la otra. Y lo mismo diríamos si ocurriese la situación contraria, ya que no olvidemos que una situación de ventaja es que trae consigo peores condiciones para los consumidores con el tiempo.
No obstante, y ya para finalizar, hemos de tener en cuenta que para Microsoft la plataforma Xbox engloba más que la consola, puesto que le dan más importancia al éxito de Game Pass en PC y al futuro de XCloud, su plataforma de videojuegos en la nube basada en juegos de la consola. Todo ello nos lleva a la siguiente pregunta: ¿estamos ante la última consola de Microsoft? Esperemos que no, la competencia es siempre buena y ya sabemos que el otro participante, Nintendo, vive de no competir.